En la infancia, la artritis infecciosa a menudo se desarrolla en un niño previamente sano, pero los adultos con frecuencia presentan algún factor predisponente como diabetes, artritis crónica, uso de glucocorticosteroides o inmunosupresores, o infecciones o trau- matismos previos de la articulación. Los pacientes con endopró- tesis también son susceptibles a las infecciones en la articulación operada.
Las bacterias son las causas más frecuentes de artritis infecciosa. En los pacientes inmunosuprimidos pueden encontrarse hongos. Aunque la infección bacteriana de la articulación es rara, es muy importante su diagnóstico ya que, si no se trata, la infección destruye rápidamente la articulación. Los microbios pueden alcanzar la articulación por medio de la circulación (infección séptica), por heridas penetrantes directas o durante una inyección intraarticular, o a partir de un foco infeccioso adyacente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario