Aunque la mayoría de los profesionales de la salud se caracterizan por una integridad ejemplar, debe ejercerse una estrecha vigi- lancia para identificar y atajar las actividades de los que se aparten de esta tendencia general. Entre los ejemplos de este tipo de prácticas figuran la manipulación de registros para mejorar los resultados propios y el establecimiento de relaciones con presta- dores de servicios externos que ofrecen comisiones y otras ventajas a cambio de consultas. Debe supervisarse la actuación de los proveedores externos para identificar a los que ofrecen condi- ciones ventajosas para obtener un contrato y después, para ahorrar, utilizan personal de escasa cualificación para la presta- ción de servicios.
Un conflicto de intereses más sutil se produce cuando los directivos y los proveedores traicionan las necesidades y los inte- reses de los trabajadores en favor de los objetivos de la organiza- ción o de sus gestores. Este tipo de acción censurable puede no ser explícita. Un ejemplo consiste en procurar la participación de los trabajadores con problemas en un programa de gestión del estrés sin hacer todo lo posible para convencer a la organiza- ción de la necesidad de reducir los niveles excesivamente elevados de estrés en el lugar de trabajo. Los profesionales expe- rimentados no encontrarían ninguna dificultad para prestar un servicio adecuado tanto a los trabajadores como a la organiza- ción, pero deberían estar dispuestos a establecer una situación de mayor rigor respetando los valores éticos en los casos en que las presiones ejercidas por la dirección alcancen niveles excesivos.
Otro conflicto sutil que puede afectar negativamente a los trabajadores se plantea al establecerse una relación de compe- tencia y no de coordinación y colaboración entre el programa de promoción de la salud y otras actividades referentes a la salud de la organización. Esta situación no es extraña cuando los programas se encuadran en áreas diferentes del esquema organi- zativo y su competencia corresponde a distintos responsables de la dirección. Como ya se ha dicho, es fundamental, incluso cuando formen parte de la misma entidad, que el programa de promoción de la salud no se desarrolle a costa del programa de salud y seguridad en el trabajo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario