La evaluación de los peligros para la salud en el lugar de trabajo debe realizarse teniendo en cuenta la totalidad de las exposiciones en comparación con los estándares establecidos, que se expresan en términos de niveles permisibles y límites de exposición y son fruto de numerosos estudios científicos sobre la correlación entre exposición y efectos en la salud. Algunos de ellos se han convertido en estándares nacionales y son jurídicamente obligatorios según la legislación y la práctica del país, tales como las Concentraciones Máximas Permisibles (MAK, en Alemania, MAC, en los países de Europa Oriental), y los Límites de Exposición Permisible (PEL, en Estados Unidos). Hay PEL para unas 600 sustancias químicas habituales en los lugares de trabajo. También hay límites de exposición media ponderada en el tiempo, límites de exposición a corto plazo (STEL), topes y límites para algunas condiciones duras que pueden dar lugar a absorción cutánea.
La vigilancia del medio ambiente de trabajo incluye el control tanto de las exposiciones peligrosas como de los efectos para la salud. Si la exposición a los peligros es excesiva, debe controlarse con independencia de los efectos y evaluarse la salud de los trabajadores expuestos. La exposición se considera excesiva si se acerca o sobrepasa los límites establecidos, tales como los ante- riormente mencionados.
Esta vigilancia proporciona información sobre las necesidades de salud profesional de la empresa y muestra las prioridades de acción preventiva y de control. La mayoría de los instrumentos que marcan las pautas de los servicios de salud en el trabajo recalcan la necesidad de realizar la vigilancia antes de poner en marcha los servicios, periódicamente durante las actividades y siempre que se produzcan cambios sustanciales en el trabajo o el medio ambiente de trabajo.
Los resultados obtenidos aportan los datos necesarios para calcular si las medidas preventivas adoptadas son efectivas y si los trabajadores ocupan puestos adecuados a sus capacidades. Los servicios de salud en el trabajo emplean también estos datos para garantizar que se mantenga una protección fiable contra las exposiciones y para formular recomendaciones sobre el modo de poner en práctica controles para mejorar el medio ambiente de trabajo. Además, la información acumulada se emplea para la realización de estudios epidemiológicos, para la revisión de los niveles permisibles de exposición y para la evalua- ción de la eficacia de las medidas de ingeniería de control y demás métodos de diversos programas preventivos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario