Como epidemiólogos, nos gustaría ver estas observaciones verificadas en estudios preventivos experimentales. Con todo, tendríamos que preguntarnos qué es más razonable: esperar a la realización de dichos estudios o recomendar desde ahora la adopción de medidas sociales dirigidas a la prevención del parto antes de término.
En Francia se ha decidido recientemente la inclusión de una guía sobre “trabajo y embarazo”, idéntica a nuestra escala sobre la fatiga, en cada gráfica médica de las mujeres embarazadas. Estas pueden calcular así su propia puntuación de fatiga y, si las condiciones de trabajo son difíciles, pedir al médico de empresa
o al responsable de seguridad en el trabajo que introduzca las modificaciones pertinentes para reducir su volumen de trabajo. En caso de que sus deseos no sean atendidos, pueden pedir al médico que les prescriba reposo durante el embarazo o incluso que prolongue el permiso prenatal de maternidad.
El mayor desafío actual consiste en establecer las estrategias preventivas más idóneas para las condiciones legislativas y sociales de cada país. Para ello hay que aplicar un enfoque económico de la salud dirigido a la valoración y comparación de las estrategias preventivas. Antes de considerar aplicable con carácter general cualquier medida preventiva, han de tenerse en cuenta numerosos factores, tales como la eficacia, por supuesto, pero también un bajo coste para el sistema de seguridad social, la creación de empleo resultante, las preferencias de las mujeres y su aceptación por parte de los empresarios y los sindicatos.
Este tipo de problema puede resolverse utilizando métodos multicriterio, como el denominado Electra, que permiten clasificar las estrategias preventivas en función de distintos criterios y ponderar éstos a partir de consideraciones políticas, dando, por ejemplo, una importancia especial a la obtención de un bajo coste para el sistema de seguridad social o a la capacidad de elegir de las mujeres (Mamelle y cols. 1986). Aunque las estrategias resultantes de la aplicación de estos métodos varían en función de los responsables de la toma de decisiones y de las opciones políticas, la eficacia debe sustentarse siempre en criterios de salud pública.
No hay comentarios:
Publicar un comentario