Los términos dermatitis y eccema son intercambiables y se refieren a un tipo particular de reacción inflamatoria de la piel que puede desencadenarse por factores internos o externos. La dermatitis de contacto profesional es un eccema exógeno causado por la interacción de la piel con agentes químicos, biológicos y físicos del medio ambiente de trabajo.
La dermatitis de contacto representa el 90 % de todas las dermatosis profesionales y en el 80 % de los casos afectará a la herramienta más importante de un trabajador: las manos (Adams 1988). El contacto directo con el agente ofensor es la forma habitual de producción de la dermatitis, aunque pueden intervenir otros mecanismos. Las partículas, como el polvo o el humo, o los vapores de las sustancias volátiles, pueden provocar una dermatitis de contacto de transmisión aérea. Algunas sustancias se transfieren desde los dedos a localizaciones distantes del cuerpo y producen una dermatitis de contacto ectópica. Por último, si un agente de contacto es activado por la exposición a la luz ultravioleta puede inducirse una dermatitis por fotocontacto.
La dermatitis de contacto se divide en dos categorías amplias según los diferentes mecanismos de producción. En la Tabla 12.2 se enumeran las características más significativas de la dermatitis de contacto por irritantes y de la dermatitis de contacto alérgica.
La dermatitis de contacto se divide en dos categorías amplias según los diferentes mecanismos de producción. En la Tabla 12.2 se enumeran las características más significativas de la dermatitis de contacto por irritantes y de la dermatitis de contacto alérgica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario